Vera Wang cumple 73 años (aunque cueste mucho creerlo)
Vera Wang acaba de celebrar su 73 cumpleaños con una fiesta en la que no faltaron ni las tartas ni el karaoke y de la que ha compartido varias imágenes en las redes sociales, que siguen obsesionadas con su aspecto físico.
La diseñadora favorita de las celebridades para vestirse de novia siempre ha lucido una figura esbelta y su característica melena larga de color azabache, pero fue hace un par de años cuando Instagram descubrió que también tiene unos abdominales de acero cuando publicó varias fotografías posando con un top deportivo y unos pantalones cortos.
Desde entonces se ha desatado una fiebre generalizada por descubrir cuál es su secreto para no envejecer, algo que ella se toma como un halago aunque no lo comprenda del todo. Cuando le insiste, la septuagenaria explica que cree en la moderación, porque no le gustan las restricciones y disfruta tomándose un buen cóctel de vodka, aunque sí reconoce que evita el sol a toda costa.
Lo más probable es que su pasado como atleta de élite también ayude. Vera pasó 16 años de su vida tratando de competir en las Olimpiadas como patinadora y la moda fue su tabla de salvación cuando sufrió una crisis de nervios al darse cuenta de que su carrera deportiva nunca llegaría a lo más alto.
En realidad, a la diseñadora no le gusta hablar mucho de ese tema porque considera que contribuye en parte a la obsesión por la juventud, o al menos por mantener una ilusión de ella, que reina en la industria en que trabaja. “Yo nunca pensé en esforzarme para preservar la juventud de una forma obsesiva y fanática”, aseguró en una entrevista a la BBC, en la que también reconoció que nunca se había planteado que ponerse minifaldas o crop-tops pudiera considerarse “arriesgado” debido a su edad.
