Sarah Jessica Parker dice adiós a su casa de Nueva York al lado de la de Carrie
La actriz Sarah Jessica Parker ha vendido por 15 millones de dólares el que ha sido su hogar familiar en Nueva York durante dos décadas. La vivienda de 1905, de cuyo interior ofreció un pequeño vistazo en un vídeo que grabó para Vogue hace cinco años, es una de esas tradicionales casas de ladrillo de la ciudad y le costó menos de 3 millones de dólares en el 2000, por lo que ha acabado convirtiéndose en una buenísima inversión.
Curiosamente se encuentra a tan solo unas calles de distancia del popular apartamento de Carrie Bradshaw en ‘Sexo en Nueva York’, que a día de hoy sigue atrayendo a un enjambre de fans de la serie deseos de hacerse una fotografía en las míticas escaleras. Las escenas de exterior se rodaban en el número 66 de Perry St., a unos bloques de distancia del lugar donde Sarah vivía hasta ahora con su marido Matthew Broderick y sus tres hijos, que también cuenta con una entrada muy similar.
Por el momento no ha trascendido quién disfrutará de ella a partir de ahora, porque el comprador ha preferido permanecer en el anonimato. Se espera que la intérprete se mude ahora a las dos mansiones colindantes que adquirió en 2014 en ese mismo barrio y que reformó para convertirlas en una sola.