
Noel Gallagher arremete contra el príncipe Enrique: ‘Nadie le toma en serio’
Por una vez, las tornas se han cambiado y ha sido Noel Gallagher, no su hermano Liam, quien ha conseguido dejar boquiabiertos a sus compatriotas al criticar abiertamente a la familia real británica para asegurar que es “un verdadero desastre”.
El príncipe Enrique, más en concreto, le parece un personaje ridículo que no ha conseguido impresionarle con su labor humanitaria ni con su decisión de abandonar la monarquía a principios de año junto a su esposa Meghan Markle en busca de la independencia económica que no había tenido hasta entonces.
“A ver, nadie le toma en serio, ¿verdad? Es tan solo un crío que está mal de la cabeza. No me gustan las personas que van de bienhechoras en general, me ponen de los nervios”, ha afirmado en una entrevista al podcast ‘The Matt Morgan Podcast’.
En el fondo, Noel siente pena por los royals debido al estilo de vida aburrido y “al servicio de Reino Unido” que se ven obligados a llevar. “No pueden ir a ninguna parte, no pueden hacer nada. Tienen que volar hasta Kenia solo para irse de vacaciones”, ha añadido.
El músico es consciente de que, después de soltar estas perlas, su nombre no aparecerá en la lista de candidatos a recibir el título de caballero por sus logros profesionales, y tampoco le importa demasiado.
“¿Alguien cree de verdad que me nombrarían caballero? Puedo decir con total seguridad que no, porque sé que nunca me ofrecerán nada parecido. No es mi culpa, sencillamente soy así. No soy un im**cil”, ha asegurado.
Irónicamente, Noel ha disfrutado a fondo descubriendo más sobre la realeza gracias a la serie de Netflix ‘The Crown’. En un principio solo empezó a verla porque aparecía su buen amigo Matt Smith, que dio vida al duque de Edimburgo en las dos primeras temporadas, pero su esposa le animó hace poco a darle una oportunidad a los nuevos episodios y le gustaron.
“Está muy bien. Mientras veía la serie no paraba de pensar que mi vida siempre ha sido mejor que la suya”, ha afirmado Noel, que creció en el seno de una familia muy humilde en Mánchester con un padre alcohólico que les pegaba a menudo tanto a sus hermanos como a él.