Me he hecho el tonto en Twitter: Elon Musk

Elon Musk dice que se ha hecho el ‘tonto’ y que se ha metido en problemas en Twitter.

Su oferta un tanto desorbitada de 44 mil millones de dólares para comprar la plataforma de microblogging podría demostrar que sí es un ‘masoquista’, aunque él mismo ha dicho que quiere crear un foro de intercambio de ideas y noticias confiable y transparente para evitar un mayor de plataformas como la de Donald Trump, a la que calificó como ‘una cámara de eco de la derecha’.

El empresario dijo cuando el Financial Times le preguntó sobre sus desfiguros en Twitter simplemente contestó que se hace el tonto en la red social y que a menudo se da ‘tiros en el pie’ y se causa todo tipo de problemas.

‘No sé, me resulta vagamente terapéutico expresarme en Twitter. Es una forma de hacer llegar los mensajes al público’, dijo el magnate.

Musk se ha convertido en uno de los usuarios más controvertidos de Twitter. Por ejemplo, en 2018 un tuit suyo pudo haber perjudicado a los inversores de su compañía Tesla, por lo que la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos impuso multas a Elon Musk y a Tesla por 20 millones de dólares.

En 2019, Musk volvió a la corte en un juicio por difamación después de descalificar sin fundamento al buzo británico Vernon Unsworth. Un tuit que resonó mucho, debido a que el empresario tenía en ese momento en la red social 22 millones de seguidores.

El dueño de Tesla conoció a su ex pareja y madre de sus hijos, la cantante Grimes, precisamente en Twitter, y ahora nuevamente está envuelto en enredos judiciales con la plataforma.

Ahora Twitter exige ‘su día en la corte’, después de que Musk le pidiera a un juez que detuviera el juicio por su acuerdo para comprar la plataforma social.

Después de semanas de tensión, Elon Musk ofreció cerrar el trato de compra de Twitter con la oferta original de 54.20 dólares por acción.

Musk, con una fortuna aproximada de 232 mil millones de dólares, dijo al diario Financial Times, que no estaría comprando Twitter por el dinero, que lo importante es que las personas cuenten con un medio inclusivo y de máxima confianza para intercambiar ideas y que sea lo más confiable y transparente posible.

El empresario cree que la consecuencia de no comprar Twitter y mejorar es que exista un debate en burbujas extremas, un ejemplo de ello, comenta, es la red social de Donald Trump, a la que calificó como una cámara de eco de la derecha, ‘bien podría llamarse Trompeta’, bromeó.

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