
Matthew McConaughey rechazó 14,5 millones de dólares por protagonizar otra comedia romántica
A día de hoy cuesta imaginar a Matthew McConaughey como algo más que el respetado y oscarizado actor en que se ha convertido, pero hace una década era conocido principalmente por ser el rey de las comedias románticas gracias a papeles como el de mujeriego empedernido que interpretó en ‘Cómo perder a un chico en diez días’ y ‘Los fantasmas de mis exnovias’.
Pese a que ese tipo de películas pagaban las mansiones frente a la playa por las que corría sin camisa, según bromea él mismo, en aquella época ya había comenzado a sentirse limitado por el estereotipo de ‘galán’ o ‘seductor’, en especial porque en la vida real acababa de casarse y de convertirse en padre.
“Personalmente, disfrutaba ofreciendo a la gente una vía para escapar durante unos minutos del estrés de la vida real y no tener que pensar; ver cómo el chico va detrás de la chica, la fastidia, pero se vuelve a levantar y al final acaban juntos. Había recogido el testigo de Hugh Grant, y me había dejado llevar”, explica en sus nuevas memorias, ‘Greenlights’ para aclarar que siente un inmenso respeto hacia ese género cinematográfico.
Sin embargo, cuando llegó el momento de pasar página, lo hizo sin volver a mirar atrás y rechazando en el proceso ofertas muy jugosas. Una de ellas, en concreto, incluía un cheque de 14,5 millones de dólares para que volviera a repetir una variante del mismo personaje en la gran pantalla, pero él no se dejó tentar.
“Lo rechacé. Si no podía hacer lo que quería, no iba a hacer lo que no quería, sin importar el precio”, ha desvelado.