Los hijos de Kim y Kanye están al corriente de los problemas entre sus padres
Hay un viejo dicho que asegura que los niños se enteran de todo, aunque no lo parezca, y los de Kim Kardashian no son una excepción. La celebridad mantiene una relación muy complicada con Kanye West desde que solicitó el divorcio el año pasado: su antiguo esposo la ha acusado públicamente de impedirle ver a los cuatros hijos que tienen en común y también ha arremetido en más de una ocasión contra Pete Davidson, el nuevo novio de Kim, de quien guarda muy mala opinión.
El resto del mundo ha seguido con una mezcla de preocupación y malsana diversión los ataques públicos del rapero, pero para ella han sido un motivación de preocupación creciente porque no puede aislar a sus dos hijos mayores -North, de 8 años, y Saint, de 6- de lo que está sucediendo en su familia.
“Soy muy honesta y sincera con ellos. Los más pequeños no lo entienden tanto, pero en lo que respecta a los mayores… ellos saben lo que está pasando”, ha explicado la celebridad -que también tiene una hija de 4 años, Chicago, y un niño de 2 llamado Psalm- en el especial ‘The Kardashians’ para ABC News.
Kim insiste en que ella siempre ha sido la primera defensora de Kanye y de su libertad de expresión artística, pero en ocasiones le cuesta mucho “hacer lo correcto” cuando el rapero decide grabar un videoclip en el que decapitaba a una versión de dibujos animados de su novio o hace públicos los mensaje conciliadores que Pete le envió para acercar posturas.
