Los abogados de Lucas Hernández arremeten contra la jueza que ha dictado su ingreso en prisión: ‘Van a por él’

El futbolista Lucas Hernández, defensa del Bayern de Múnich, se encuentra “devastado” después de que le haya caído encima “una losa” tan pesada como la orden de ingreso en prisión que decretó ayer miércoles contra él una magistrada de Madrid. Según la jueza, el deportista ha incumplido los términos de la orden de alejamiento que le obligaba a mantenerse a una distancia prudencial de su esposa Amelia Lorente, con quien se reconcilió hace unos años y junto a la que ahora vive con absoluta normalidad.

La descripción del estado anímico del jugador, y de su familia, ha sido ofrecida por los propios abogados del internacional francés, con quienes se ha puesto en contacto el diario español El Confidencial para recabar su versión de lo ocurrido. En opinión de estos, se está cometiendo una grave injusticia contra Lucas que podría empañar de forma irreparable su reputación personal y profesional, con el daño adicional que esto podría ocasionar para el Bayern de Múnich, que por el momento guarda silencio sobre el caso, y sus intereses económicos.

Los letrados de Lucas argumentan que la orden de alejamiento no debería aplicarse al encontrarse supuestamente paralizada por un recurso interpuesto ante la Audiencia Provincial de Madrid. También han recordado que Lucas, condenado hace cuatro años por violencia de género a raíz de un incidente doméstico con su esposa, ya cumplió debidamente con su castigo y que la propia Amelia reconoció que las agresiones físicas que se dieron en el marco de su fuerte discusión fueron mutuas.

“Todo esto no tiene sentido, han ido a por él”, han señalado al citado diario fuentes del entorno del futbolista, quienes consideran que se está “desfigurando el caso” para acometer una injusticia flagrante contra Lucas, hermano del también jugador Theo Hernández.

Por su parte, la magistrada considera que la sentencia de 2017, que incluía esa orden de alejamiento de 500 metros, debe seguir aplicándose al margen de los recursos presentados en su contra y del hecho de que la propia pareja decidió dejar de cumplirla al entender que ya se había cumplido la pena. Tanto es así, que Theo y Amelia se fueron juntos de luna de miel para zanjar de una vez por todas su violenta crisis y esa es una de las infracciones a las que alude la magistrada para justificar su orden de ingreso en prisión, que deberá materializarse en el plazo de 10 días.

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