Las autoridades de Catar niegan que vayan a arrestar a quienes porten banderas del arcoíris durante el Mundial de fútbol

A lo largo de las últimas 24 horas, no ha dejado de difundirse en los medios de comunicación y las redes sociales la supuesta noticia de que las autoridades cataríes arrestarán a cualquier espectador que exhiba, durante el próximo Mundial de fútbol que se disputará en el país árabe a finales de noviembre, cualquier tipo de simbología relacionada con los derechos del colectivo LGBTQ.

Según un supuesto portavoz de la organización del torneo, esos ‘delitos’ podrían acarrear penas de entre siete y once años de cárcel, un castigo que parece excesivo incluso viniendo de un país de esta naturaleza, conocido por su conservadurismo religioso y por la opresión a la que, en consecuencia, se ven sometidos homosexuales, transexuales y, por supuesto, también aquellas mujeres que tratan de escapar del papel tan limitado que juegan en la sociedad.

El asombro que ha provocado el anuncio de estas fuertes medidas, así como las declaraciones que acompañan a la mayoría de los artículos que se han publicado sobre este asunto, han llevado a portales de verificación informativa como ‘Maldita.es’, web especializada en la detección de bulos, a investigar sobre la veracidad de estos hechos. El medio se ha puesto en contacto con la embajada de Catar en España para que alguna fuente oficial se pronunciara sobre las palabras supuestamente expresadas por Nasser Al-Khater, ese portavoz que, en realidad, es el presidente del comité organizador del evento.

Como se desprende de algunos tuits, y según lo reproducido por ciertos diarios digitales, Al-Khater habría afirmado lo siguiente: “Quien luzca la bandera LGBTQ en la próxima Copa del Mundo de fútbol será arrestado por 7 u 11 años. Estamos en un país islámico, se debe respetar nuestra religión, creencias y cultura”. Sin embargo, un portavoz de la citada embajada ha asegurado que esas palabras nunca han salido de boca de Al-Khater.

Al margen del verdadero sentir de las principales figuras del régimen catarí con respecto a la comunidad LGTBQ, lo cierto es que resulta imposible encontrar alguna entrevista o declaración oficial de Al-Khater en la que aparezca la cita del párrafo anterior. Parece que nos encontramos con un ejercicio de desinformación en toda regla, lo que por otro lado no debe eclipsar el preocupante historial de tropelías y agresiones a los derechos fundamentales que se producen en un país con cada vez más peso e influencia en la escena internacional.

Close Bitnami banner
Bitnami