La portada de Kamala Harris para Vogue ha decepcionado a los lectores de la revista
Kamala Harris, la vicepresidenta electa de Estados Unidos, se ha convertido en la flamante chica de portada del número de febrero de Vogue, pero la esfera virtual se siente en gran parte decepcionada con su elección de vestuario.
En la imagen, la primera mujer en ocupar ese cargo en la historia del país aparece posando frente a un fondo verde con una cortina rosa y ataviada con una americana marrón de Donald Deal, unos pantalones negros y unas deportivas de la marca Converse del mismo color, y en opinión de muchos, esa combinación no está a la altura de las páginas de la biblia de la moda o de la importancia de su puesto en el actual panorama político.
Según los rumores, Kamala rechazó la oferta de recurrir a uno de los estilistas de la publicación para elegir la ropa y el maquillaje que luciría con ayuda de su propio equipo. Por otra parte, ni ella ni sus colaboradores esperaban supuestamente que se eligiese esa fotografía en concreto para la portada de la edición impresa. En su lugar, creían que Vogue se decantaría por otra en la que lleva puesto un traje pantalón de color celeste del diseñador Michael Kors, que sí se ha usado para la versión digital, según ha asegurado uno de los colaboradores del New York Magazine a través de Twitter.