La Iglesia de Satán se desmarca de Sam Smith y Kim Petras tras su actuación en los Grammy
Sam Smith y Kim Petras causaron un gran revuelo entre ciertos sectores de la sociedad estadounidense con la interpretación de su sencillo ‘Unholy’ que realizaron el pasado domingo en la gala de los Grammy. En cuanto un artista saca a relucir los cuernos, las luces rojas y el látex a juego, en seguida surgen las acusaciones de satanismo. Pero la Iglesia de Satán ha querido desmarcarse de los dos artistas; de hecho, una de sus figuras más importantes, David Harris, ha asegurado que el espectáculo estuvo “bien”, aunque no fue “nada particularmente especial”.
Para el alto cargo de la organización, la imaginería del número musical está un poco pasada de moda y los elementos visuales como “el fuego y los cuernos” ya no evocan el mismo componente de provocación que hace unas décadas ni causan el mismo impacto entre el público. Políticos como el senador Ted Cruz y las congresistas Marjorie Taylor Greene y Lauren Boebert no están de acuerdo con él.
Los tres han tachado la actuación de “malvada”, y ellas en concreto hicieron referencia al Templo Satánico -un grupo diferente a la Iglesia de Satán- en el comunicado de condena a ambos artistas que hicieron público tras la entrega de premios. Los aludidos se han distanciados de Sam y Kim explicando que el mensaje de Lil Nas X en ‘Montero’ está más en línea con la filosofía de su congregación, que se opone a todo lo sobrenatural y espiritual y no cree en la vida después de la muerte ni en Satán, así que tampoco adora a Dios o al diablo. Y tiene sentido, porque en el vídeo musical el rapero desciende al infierno, asesina a Satán y se corona a sí mismo para ocupar su trono.
En cualquier caso, David Harris cree que el trío de políticos se están comportando como “delicados copos de nieve” y lamenta que utilicen la religión -cualquiera que sea- como un arma arrojadiza en un escenario nacional.