La historia de Norm Self, el sacerdote que colgó la sotana para dedicarse al porno
Tras una vida dedicada al sacerdocio, Norm Self se ha convertido en una sensación como actor porno desde hace poco más de cuatro meses.
Self se unió al clero cuando tenía 18 años en California, Estados Unidos y fue hasta que cumplió 20 que se casó y se mantuvo en esa relación por 28 años, hasta que se divorció.
Recientemente, en diversas entrevistas el hombre ha revelado que a los 60 años comenzó a recibir en su Iglesia a otros hombres que creían ser homosexuales y le pedían ayuda para saber qué camino tomar en sus vidas. Fue a partir de esa experiencia que reconoció su homosexualidad.
Después de mucho pensarlo, abandonó la Iglesia y formó una relación con otro hombre que lo motivó a incursionar en la pornografía como un actor activo.
“Pensé quién podría ofenderse y quién querría escribirme de mis contactos. Pero ya no me preocupo porque esa es su lucha. Mi problema con la iglesia es que es raro que el sexo sea tratado como una parte alegre de la vida espiritual”, contó en una entrevista que forma parte del documental de Channel 5, ‘OAPS On The Game: The Sex Business’.
Self se identifica como un “íntimo sagrado”, un maestro que ayuda a hombres, mujeres y personas de todos los géneros a explorar el poder curativo del placer, y un estudiante y participante de la Body Electric School, que busca integrar la sexualidad y la espiritualidad.
En 2018 participó en su primera película para adultos, junto a dos profesionales del género más jóvenes, lo que resultó en una experiencia “encantadora”.
Para él, aceptar protagonizar películas pornográficas fue una decisión que tomó como parte de su misión porque “las normas negativas para el sexo se eliminen del vocabulario de nuestra sociedad y se reemplacen con el mensaje implícito de que nuestro derecho de nacimiento es disfrutar alegría erótica y dicha”, contó a HuffPost.
Al ser cuestionado por Noah Michelson, de Huffpost, sobre qué es lo que un joven de 21 años podría aprender de él, describió: “He escuchado de ‘autoridades acreditadas’ que los jóvenes son fisiológicamente más capaces de tener relaciones sexuales frecuentemente. No discutiría eso. Pero por mi experiencia y los testimonios de otros hombres mayores, diría que eso no es necesariamente mejor. De hecho, en muchas áreas de la vida, incluido el sexo, envejecer puede aportar todo tipo de sutilezas deliciosas y hacer la vida más rica y plena”. contestó.
“Aprende a prestar atención y busca esas sutilezas. Aprende a notar, a disfrutar y a dar gracias por esas cosas más sutiles en la vida que lo hacen más agradable. ¡Y aprende a amar de verdad a cada pareja con la que tienes relaciones sexuales, al menos mientras estás teniendo relaciones sexuales! Y aprende que hay muchas otras ‘zonas erógenas’ además de sus genitales. Conozca y entrene realmente su mente: ¡ese es su mejor órgano sexual!”, dijo el ex cura, hoy estrella porno.
El hombre, que ya ha hecho cuatro películas porno en los últimos dos años, afirma tener una vida sexual más vibrante que la que tenía cuando tenía 40 años.
“Mi yo de 85 años es más vibrante que mi yo de 45 años. Es como si mi energía erótica se hubiera apoderado de mí y me habitara”, explicó al Daily Mail.
Norm, quien recibe pago alguno por sus películas, contó que fue su pareja quien le pidió que se involucrara en la industria del cine para adultos.
“Todo comenzó cuando mi pareja me preguntó si querría ir a ver el rodaje de una película. Yo acepté y, de repente, me llamó mucho la atención todo lo que allí ocurría. Me sentí como si estuviera en una fiesta, es una de las cosas que más admiro de hacer porno”, aseguró Self.
“¿Por qué hay que esconderse para hacerlo en vez de convertir las relaciones sexuales en una experiencia liberadora y de unión con los demás?”, añadió.