
La duquesa de Sussex podría haber dado hace años una pista sobre el nombre de su futura hija
No todo fueron momentos tensos o tristes en la entrevista que la duquesa de Sussex le concedió a su buena amiga Oprah para hablar de la sensación de abandono y el acoso que había experimentado durante su etapa como miembro en activo de la familia real británica. Meghan también desveló acompañada de su marido que el bebé que ambos esperan será una niña, lo que les llena de alegría porque -aunque lo importante es que su retoño esté sano después del aborto espontáneo que ella sufrió el año pasado- ahora tendrán ‘la parejita’.
Esta noticia implica además que la duquesa por fin tiene a quien entregarle una joya muy especial que guarda desde hace tiempo. Mucho antes de conocer al príncipe Enrique, ella se dio el capricho de comprar un reloj de Cartier -el modelo Tank Française- como regalo para sí misma después de que su carrera interpretativa despegara al hacerse con un papel en la serie ‘Suits’ e incluso lo mandó grabar con el mensaje ‘De M.M. para M.M.’ en la parte trasera de la esfera, con la esperanza de poder dárselo algún día a su propia hija.
En vista de que esta pieza cuesta más de seis mil dólares, lo más probable es que vayan a tener que pasar un par de décadas antes de que la futura hija de los duques de Sussex la ‘herede’, pero la inscripción podría ser una pista sobre el nombre que Enrique y Meghan podrían elegir para ella para que encajara con las iniciales que su madre grabó en ese reloj: M.M.