La duquesa Catalina de Cambridge nunca pasa las navidades con su familia
En unas pocas semanas los royals británicos volverán a reunirse en Sandringham para celebrar juntos la navidad, tal y como dicta la tradición. Muchos matrimonios reparten la nochebuena y la navidad entre sus respectivas familias, o van alternando cada año, pero los duques de Cambridge tienen una cita fija con Isabel II.
Como esposa del segundo en la línea de sucesión al trono y futura reina, Catalina sabe que se la espera en la casa de campo que la abuela de su marido tiene en Norfolk, y por tanto ella nunca pasa estos días con sus propios padres y hermanos. De hecho, su aparición en el servicio celebrado el día 25 en la iglesia de Santa María Magdalena es siempre una de las más celebradas por las decenas de curiosos que se acercan hasta el lugar.
Isabel II es consciente del sacrificio que realizan los esposos de sus hijos y de sus nietos, y lo tiene muy en cuenta. En 2012, los padres de Catalina recibieron una invitación personal de la soberana para unírseles en Sandringham porque ella estaba esperando su primer hijo, el príncipe Jorge, e hizo lo mismo por la madre de la duquesa de Sussex después de que Meghan se comprometiera con el príncipe Enrique para que no se quedara sola en Estados Unidos.
La monarca tampoco puso ningún impedimento a que Guillermo y Catalina acudieran a casa de los Middleton en 2016, aunque desde entonces el matrimonio ha preferido pasar siempre estas fechas con la monarca. A cambio, Catalina despide el año con su familia acompañada de su esposo y de sus tres hijos.
