La boda de Petra Ecclestone: en una localización secreta y con la amenaza de un ex vengativo
La rica heredera se ha casado con el padre del menor de sus cuatro hijos este sábado en una ceremonia que parecía sacada de un cuento de hadas porque no faltó ni el vestido de princesa con tiara incluida ni el villano dispuesto a arruinarle el día.
Petra Ecclestone contrajo matrimonio en la mansión georgiana que posee en el centro Londres, una propiedad valorada en 200 millones de dólares, pero los invitados no supieron hasta el último momento dónde debían acudir porque la localización se mantuvo en secreto por miedo a que el primer esposo de la novia, James Stunt, decidiera realizar una aparición sorpresa con la peor de las intenciones.
La hija de Bernie Ecclestone no estaba dispuesta a que se produjera una situación similar a la que vivió Britney Spears cuando su propio ex se presentó en su casa unas horas antes de su enlace, y contrató fuertes medidas de seguridad para garantizar que nadie pudiera colarse sin invitación. Finalmente se demostró que no tenía motivos para preocuparse porque James no hizo acto de presencia; parece que sus problemas con la justicia por blanqueo de dinero asociado al crimen organizado le mantienen muy ocupado como para pensar en su ex.
Lo que Petra no pudo evitar fue que los problemas legales de su padre empañaran en parte la jornada. El antiguo magnate de la Fórmula 1 ha sido acusado de fraude fiscal en Reino Unido por no declarar activos en el extranjero y se enfrenta a un juicio que arrancará en agosto con una vista preliminar, pero esa incertidumbre no le impidió acompañar a su hija -la mayor de las dos que tuvo con su segunda esposa- camino del altar.
