El rey Harald de Noruega se ha sometido a una operación cardíaca
Tras vivir varios ingresos hospitalarios a lo largo de este accidentado 2020, motivados por sus crecientes problemas respiratorios, el rey Harald de Noruega ha sido operado este viernes en un hospital de Oslo para que le fuera reemplazada una válvula cardíaca, la cual le fue instalada en 2005, por una nueva que le ayudará a solventar tales contratiempos y, en términos generales, a mejorar sus niveles de bienestar de cara al futuro.
El monarca, de 83 años, se encuentra ya reposando en las instalaciones médicas y, según el comunicado que ha emitido la casa real hace unas horas, su estado de salud es en ese sentido óptimo. Se desconoce, sin embargo, cuándo podrá regresar a la escena pública y la duración del período en que su hijo Haakon, príncipe heredero, tendrá que ejercer sus funciones constitucionales.
El soberano acudió al hospital Rikshospitalet de la capital noruega en la tarde de ayer jueves y la noticia fue entonces abordada con bastante preocupación, teniendo en cuenta que su última visita al mismo centro médico se produjo solo unas semanas antes y en medio de un clima de hermetismo que, no obstante, ahora se ha visto sustituido por una dinámica de información continua y fluida por parte de los servicios de información de la jefatura del estado.
Finalmente se confirmó que el ingreso hospitalario que experimentó Harald el pasado 25 de septiembre se debía a una insuficiencia respiratoria grave, aunque su situación mejoró notablemente en las horas posteriores a su llegada al centro y fue dado de alta poco después. En esa ocasión, el monarca tuvo que renunciar a su reunión semanal con el primer ministro noruego y fue el citado Haakon quien ocupó su lugar.