Despiden a la protagonista del musical ‘Tina’ por perderse una función para actuar con los Rolling Stones
Hace siete días la actriz y cantante Chanel Haynes compartió en su cuenta de Instagram un correo electrónico que había recibido de los productores del musical ‘Tina’, que ella estaba protagonizando en el West End londinense, informándole que se le había aplicado una suspensión y que no podía acudir al teatro hasta nuevo aviso. En la práctica, eso implicaba que no podría participar en las últimas representaciones de la obra.
Ahora la artista ha explicado qué ocurrió exactamente en una entrevista a la revista Rolling Stone. Hace poco más de una semana se le presentó de forma inesperada una oportunidad única en la vida: actuar precisamente con los Rolling Stones en el concierto que ofrecieron el 21 de junio en Milán. Una de las vocalistas que acompaña habitualmente a la banda en sus giras no estaba disponible y le ofrecieron su puesto por una noche para que cantara ‘Gimme Shelter’ con Mick Jagger. Y nadie dice que no a sus Satánicas Majestades.
El problema era que esa misma noche había programada una función del musical, pero según ha explicado ella, en su mente todo el mundo salía ganando con la situación: ella volaba a Italia para cumplir un sueño y su sustituta podía subirse al escenario para brillar con luz propia. Sin embargo, la gerencia del teatro no compartía su punto de vista.
En cuanto regresó a Londres tras el exitoso concierto, Chanel recibió el mencionado email de parte del director general Mark Rubinstein para explicarle que se había abierto una investigación en torno a su viaje. “He de decir que, si estás en el West End, una sola persona no puede detener un espectáculo”, se ha justificado para aclarar que su ausencia no suponía el fin del mundo. “Las cosas no funcionan así. Al final, todo fue bien. Había un espectáculo esa noche y el espectáculo continuó adelante, al igual que el de los Stones en Milán. Se representaron todos los shows, y yo me alegré por ello”.
Chanel no quiere dar detalles acerca de su suspensión, pero desde luego la puso en una situación muy incómoda porque varios familiares y amigos tenían previsto volar a Londres para verla en su última actuación y se quedaron con las ganas. Entre el grupo se encontraba una persona que ha sido víctima de violencia doméstica a lo largo de su vida y que ayudó a la actriz a construir el personaje de Tina Turner para que reflejara de manera realista los malos tratos que marcaron su matrimonio con Ike Turner.
“Eso es lo que más me dolió”, ha admitido. “Ella fue mi musa, quien me ayudó a contar bien la historia desde su propio punto de vista….Tampoco pude despedirme de los niños que forman parte del reparto. Eso fue duro”.