Beyoncé investiga a sus colaboradores en busca de escándalos sexuales
Muchas estrellas de la música se han visto obligados a disculparse públicamente por haber realizado colaboraciones con compañeros de profesión sin comprobar antes sus antecedentes. Dua Lipa, por ejemplo, tuvo que asegurar que jamás habría invitado al rapero DaBaby a participar en una de sus canciones si hubiese estado al corriente de sus ideas homófobas, que él pregonó desde el escenario en uno de sus conciertos poco después de que se conocieran.
Lady Gaga y Chance The Rapper también tuvieron que entonar el mea culpa y reconocer que no habían prestado la suficiente atención a las acusaciones de acoso y agresiones sexuales que se habían realizado contra R. Kelly a lo largo de los años cuando accedieron a trabajar con él.
Beyoncé es famosa por controlar hasta el más mínimo aspecto tanto de su carrera como de su imagen pública, y no está dispuesta a permitir que su nombre se asocie con el de cualquier persona mínimamente sospechosa de haber abusado de su posición de poder para coaccionar a otros.
La cantante mandó investigar a todos los colaboradores y productores que han participado en su próximo álbum ‘Renaissance’ y rechazó a todo el que se haya enfrentado a la más mínima acusación relacionada con comportamientos inapropiados en el entorno personal y profesional. Dos canciones de artistas con un alto perfil mediático fueron rechazadas por esa misma razón a pesar de que ninguna de ellos ha sido declarado culpable de ningún delito: “Está enviando un claro mensaje a la industria discográfica tras los preocupantes casos de gente como R Kelly o Harvey Weinstein”, ha asegurado una fuente de su entorno.
Beyoncé no ha prestado atención a quienes la criticaron incluso en su propio equipo por mostrarse demasiado dura a la hora de vetar posibles colaboradores porque quería que el proceso de creación de su disco reflejara el mensaje de empoderamiento femenino que transmiten sus canciones.
