Adele pasa una semana en la mansión de su novio Rich Paul para ‘salvar’ su relación
Tras algunos rumores de una posible fractura, parece que la relación entre la cantante británica Adele y Rich Paul va mejorando. Prueba de ello, la estancia de la intérprete de ‘Rolling in the Deep’ en la mansión del agente deportivo estadounidense por más de una semana
La estrella del pop, de 33 años, comenzó a salir con Paul, de 40 años, a principios de 2021, sin embargo, hace unos días el diario The Sun afirmó que la cantante habría cancelado su esperada residencia en Las Vegas cuando su romance se topó con un bache en el camino.
La publicación aseguró que la pareja había tenido algunas dificultades para pasar tiempo juntos en las últimas semanas, debido a los constante viajes de él por motivos de trabajo y a los conciertos que ella tenía previstos en la Ciudad del Pecado, que ahora se han pospuesto.
Una fuente reveló a la revista: “Adele se está quedando en la casa de Rich en Beverly Hills para tratar de arreglar su relación porque las cosas se han vuelto tensas. Apenas se veían a principios de mes porque él estaba fuera por trabajo y ella intentaba centrarse en el espectáculo de Las Vegas”.
“A ella le molestaba que él no pudiera estar allí con ella cuando las cosas empezaron a desmoronarse con la residencia y eso hizo que las cosas fueran difíciles para ambos. Ella lo necesitaba, pero él no podía porque también tiene su propia carrera”.
Se dice que fue un “momento muy emocional y estresante para ella”, pero ahora, la pareja estaría tratando de salvar las cosas pasando algún tiempo de calidad juntos.
La fuente también señaló que “realmente se gustan” pero las últimas semanas han sido “difíciles”.
Richard Johnson, del New York Daily News, informó de que la cantante había cancelado su residencia en el Caesars Palace ‘Weekends With Adele’, menos de un día antes del debut por problemas con su novio.
“Hay problemas en el paraíso”, dijo Johnson a una fuente interna. “Por eso no puede actuar”.
Fuentes cercanas al campamento de Adele afirman que la cantante había estado llorando durante los ensayos y los había interrumpido para atender las llamadas telefónicas con Paul.
Aunque la residencia se iba a inaugurar la semana pasada, con actuaciones programadas hasta abril, Adele reveló a sus fans, muchos de los cuales ya estaban en la Ciudad del Pecado en ese momento, varias razones para retrasar la residencia.
“Mi espectáculo no está listo”, dijo la semana pasada. “Hemos hecho todo lo posible para montarlo a tiempo y que sea lo suficientemente bueno para ustedes. Pero hemos sido absolutamente destruidos por los retrasos en las entregas y el COVID”.
Live Nation y el Caesars Palace habrían tenido problemas para llegar a un acuerdo con la cantante lo suficientemente rápido como para salvar su residencia en Las Vegas, por lo que Alede culpó entre lágrimas a los problemas de “entrega” y al COVID-19.
Antes de las noticias sobre sus problemas de relación, también se informó de que los retrasos se debían a que la cantante estaba descontenta con la escenografía, en particular por una piscina erigida en medio del escenario.