Stephanie Beacham no conoció a ‘su media naranja’ hasta los 60 años
Stephanie Beacham no conoció a ‘The One’ hasta que cumplió 60 años de edad.
La actriz de 75 años estuvo inicialmente casada con John McEnery desde 1973 hasta 1979 y tiene dos hijas, Phoebe, de 47 años, y Chloe, de 45 años, pero conoció al médico y músico Bernie Greenwood hace 15 años y se enamoró después de intercambiar algunos correos electrónicos.
‘Conocí a muchas mujeres en sus cuarenta que tienen éxito, pero sola no conocí a Bernie hasta que tenía 60 años. ¡Que sea una inspiración! Seamos honestos, eso es después de la menopausia, después de los niños. Eso es después muchas cosas – pero no todas las cosas! Nos enamoramos, sin compromiso. Nos dieron, a través de anteojos color de rosa, la visión del otro como si tuviéramos 35. ¡Dios nos permitió la magia! Había estado enviando correos electrónicos, pero cuando escribimos suficientes correos electrónicos, sabía que amaba a este hombre. Pero no sabía que me gustaba’, declaró la actriz.
La estrella de ‘Dynasty’ continuó revelando que la reunión se produjo después de que una amiga le sugirió que conociera a Bernie, quien en ese momento acababa de salir de una relación de casi 40 años, y tuvo que aprender a usar su computadora para poder enviar mensajes.
‘Le había dicho a mi amiga que está casada con un productor musical: -¿Tiene su esposo algún músico con el que valga la pena salir un sábado por la noche?- Solo quería ir y escuchar algo de música con una compañía nueva. Ella dijo: -¡Tienes que conocer a Bernie!- Bernie acababa de terminar una relación de 39 años y sabía que era una persona maravillosa. Mi amigo me pidió que le enviara un correo electrónico y le dije: -¡Por supuesto que no! Pero si quieres que me envíe un correo electrónico, eso será multa-. Ambos admitimos después que habíamos pasado nuestros días esperando el próximo correo electrónico. Nunca había tocado mi computadora [antes], ¡era solo un bulto blanco en mi mesa! No podía creer lo lento que estaba escribiendo’, declaró la actriz a la revista OK!
Hace algunos años, Bernie le pidió a Stephanie que se casara con él y, aunque ella aceptó, la pareja decidió no casarse porque ya se sentían casados, pero podrían decidir casarse por capricho.
‘Bernie dice: -¿Por qué dijiste que sí entonces?- a la propuesta, y digo: Porque fue una de las cosas más románticas que alguna vez me han pasado. Nunca podría haber dicho que no. Pero nunca hemos podido ponernos de acuerdo o decidir qué tipo de boda queremos, porque estamos casados, por el amor de Dios, simplemente no estamos [en realidad] casados. Es sólo que no haría ninguna diferencia. Y la idea de una boda desordenada no es algo que me moleste. Pero podemos hacerlo. De repente podemos decir: -Oh, por el amor de Dios, ¿tenemos una fiesta esta tarde y nos casamos?- Simplemente no lo hemos hecho y no es por otra razón que no podemos llegar a entender qué tipo de boda tendríamos’, concluyó.
