Isabel II recibe a la nueva primera ministra, Liz Truss, en el castillo de Balmoral
Como estaba previsto desde hace semanas y a raíz de los problemas de movilidad que Isabel II lleva meses experimentando, el Reino Unido ha vivido este martes un momento histórico al romperse una de las tradiciones constitucionales de la historia reciente del país. En lugar de optar por la sala de audiencias del palacio de Buckingham, en Londres, la nonagenaria monarca ha recibido a la nueva primera ministra, Liz Truss, en el castillo de Balmoral, residencia veraniega de la soberana.
La casa real ha publicado, hace solo unos minutos, la primera imagen de la jefa del estado en su reunión con la que fuera responsable de la cartera de Exteriores. La reina aparece muy sonriente y estrechando la mano a su interlocutora, poco antes de encargarle la tarea, con toda la formalidad que requiere la ocasión, de formar “un nuevo gobierno en su nombre”, labor que lógicamente Truss ha aceptado.
La fotografía ha sido muy celebrada y comentada por aquellos internautas que estaban deseando volver a ver a la reina, preocupados como están por su fragilidad física, comprensible en una señora de 96 años que, además, tuvo que lidiar a principios de año con una infección por Covid. Su sonrisa ha cautivado a sus seguidores de todo el mundo, como demuestra un comentario en italiano que, entre muchas exclamaciones, le desea buena salud y una larga vida.
Se espera que Isabel II permanezca en Balmoral como mínimo hasta mediados de este mes de septiembre. Posteriormente regresará al castillo de Windsor que se ha convertido en su hogar habitual desde el comienzo de la pandemia. Hace solo unos días, los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, finalizaron su mudanza a una nueva vivienda, Adelaide Cottage, que está ubicada a escasos metros de los apartamentos privados de Isabel II.