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Aunque para buena parte de la opinión pública Cat McDonnell se destaca únicamente por ser la esposa de Pau Gasol y la madre de su hija Elisabet Gianna, lo cierto es que la joven contaba con una gran reputación como analista financiera antes de conocer al hombre de su vida, con quien inició su relación sentimental allá por el año 2016. Poco después, la estadounidense cambió de aires y ejerció hasta hace poco como directora de comunicación en una fundación solidaria de California.

Esa nutrida trayectoria profesional ha vuelto a ponerse de relieve ahora gracias al documental ‘Lo importante es el viaje’, disponible en Amazon Prime. Y lo que es más, el propio pívot catalán ha admitido que su mujer tuvo que realizar numerosos sacrificios en su vida laboral para apostar por una historia de amor no exenta de dificultades, asociadas estas a la carrera deportiva del astro de la NBA y al elevado perfil mediático que se desprende de ser Pau Gasol.

“Ella ha tenido que sacrificar su carrera profesional por estar conmigo, con una muy buena posición en una gran empresa, con una formación que yo no tengo ni a la que me acerco”, ha confesado el exjugador de Los Angeles Lakers y el FC Barcelona, entre muchos otros equipos, en un extracto de la grabación.

Esta entrevista ha servido para dar a conocer mejor tanto el historial como la personalidad de Cat McDonnell, quien lógicamente no lo tuvo nada fácil a la hora de renunciar a sus ambiciones profesionales para dar prioridad absoluta a su proyecto de vida con el deportista español. El dilema que se le presentó, al tener que elegir entre el trabajo y su deseo de casarse y formar una familia con su amado, creó “frustraciones” que afortunadamente ya parecen superadas.

“Dejar mi trabajo para simplemente irme a vivir con alguien es un concepto que me cuesta aceptar, y creo que a muchas mujeres, especialmente hoy en día, les pasa lo mismo. Echarte a un lado, quedarte en casa para hacer esto o lo otro, no es exactamente mi estilo”, ha señalado así de tajante, antes de que su marido tomara de nuevo la palabra para respaldar sus afirmaciones. “Eso crea frustraciones, tanto individuales como para la pareja. Eso es muy difícil”, ha apuntado.