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Por si no fuera suficiente con la lesión que sufrió Harrison Ford en su hombro durante un ensayo de las trepidantes escenas de acción que, a buen seguro, exhibirá la película, lo que le dejó fuera de juego durante tres meses, ahora el rodaje de la quinta entrega de la saga ‘Indiana Jones’, que tiene lugar en los míticos estudios Pinewood del Reino Unido, ha vuelto a sufrir un importante revés con la aparición de un brote de gastroenteritis en el seno de su equipo.

Según el diario The Sun, de momento la infección ha obligado a enviar a casa a unas cincuenta personas pertenecientes al plano técnico y operativo de la grabación. Fuentes de la producción aseguran que nadie del elenco del filme ha sufrido por ahora contagio alguno, pero en cualquier caso eso no impedirá que el proceso vuelva a ralentizarse tras una temporada primaveral y veraniega francamente aciaga que echó por tierra todas las previsiones del calendario.

Asimismo, las temibles garras de la gastroenteritis también han alcanzado a otro importante rodaje que tiene lugar en el condado inglés de Buckinghamshire, el de la nueva entrega de las aventuras de ‘Ant-Man’, superhéroe de la factoría Marvel. Este contratiempo se une además a la reciente cancelación temporal de la grabación debido a un brote de coronavirus del que, afortunadamente, no se desprenden consecuencias de gravedad para la salud de los trabajadores.

“No han dejado de caer como moscas por culpa de la gastroenteritis. También ha habido muchos problemas con la Covid, por lo que se trata de un doble golpe. Los dos filmes se han visto afectados. En el caso de ‘Indiana Jones’, se cifran en unos cincuenta los trabajadores afectados. Por suerte, las grandes estrellas han podido sortear todo este desastre”, ha asegurado un informante al citado periódico.